Jackie Viteri

¿En ocasiones mientras otra persona habla, sólo piensas en qué vas a opinar? ¿Te cuesta esperar a que el interlocutor termine su argumento? Si tus respuestas son afirmativas, no estás solo. Uno de los errores cometidos con mayor frecuencia es interrumpir a otra persona mientras habla.

A nadie le gusta que lo interrumpan y por otro lado, a nadie le gusta estar frente a un monólogo o sentirse excluido de una conversación. Ambos casos son incómodos, hoy hablaremos sobre el interruptor ¿cómo hacer con un fastidioso que no puede esperar a que termines de hablar?

Aquí mis sugerencias para enfrentarlo con elegancia sin parecer que eres un antipático, elige de acuerdo a tu caso:

1. Ignóralo. En ocasiones, las personas interrumpen sin notarlo o sin malas intenciones. Al notar su falla, hacen silencio.

2. Pídele que te permita concluir la idea. Le haces saber además, que luego le cederás el turno para exponer su opinión.

3. Espera a que el inoportuno termine su interrupción. Entonces retoma tu tema con algo así: “Como les decía…”, sin parecer sarcástico.

4. Confronta a la persona en privado. De manera amable hazle saber que, con frecuencia comete esa interrupciones que pueden hacerlo lucir mal ante los demás.

Ten cuidado al interrumpir, pues al hacerlo envías varios mensajes. Aquí comparto algunos:

• Sé lo que vas a decir, quiero evitar ese tema.
• No te dejo terminar porque me aburre lo que dices.
• Ya conocía eso, no estás diciendo nada nuevo.
• Se me puede olvidar lo que tengo en mente, puedo perder la oportunidad de impresionar .

Las interrupciones sólo se justifican ante una urgencia o necesidad inmediata y de hacerlo, debe estar acompañada de una frase de cortesía como “disculpa que interrumpa…”. De no hacerlo, se considera un irrespeto y una falta grave de educación.